¿Solo los locos van al psicólogo?
Es completamente comprensible sentir miedo de ser juzgado por ir al psicólogo, ya que, aunque cada vez hay más aceptación, todavía persisten estigmas alrededor de la salud mental como la famosa frase de: “solo los locos van al psicólogo”. El estigma está cambiando, cada vez más personas reconocen la importancia de la salud mental y recurren a la terapia para mejorar su calidad de vida, lo que antes se veía como algo “extraño” o “tabú” hoy se está normalizando. Por consecuente, buscar ayuda psicológica no es algo de lo que debas sentirte avergonzado, sino todo lo contrario, ya que, priorizar tu bienestar mental es un acto de valentía y cuidado propio.
Cuidar de tu mente es igual de importante que cuidar de tu cuerpo. Así como no te avergüenzas de ir al médico cuando te sientes mal físicamente, tampoco deberías sentirte avergonzado por buscar ayuda para tu bienestar mental. Ambos son igual de importantes para conseguir una adecuada salud integral, tanto tu mente y cuerpo saludables. Así mismo, para romper otro estigma de la salud mental es importante entender que tomar la decisión de ir a terapia es un signo de fortaleza y no de debilidad, así como, pedir ayuda no es una señal de que te has dado por vencido, sino al contrario, significa que no estás dispuesto a desfallecer y quieres luchar junto con una guía profesional para conseguir tu bienestar y tranquilidad.
Reconocer que necesitas apoyo y estar dispuesto a buscarlo muestra madurez y valor de tu parte, que te estás escogiendo a ti frente a todo. Es importante entender que todos estamos expuestos a atravesar momentos difíciles en la vida y ser proactivo para mejorarlos es una decisión responsable y muy personal. Pedir ayuda es parte del autocuidado al igual que otras formas, como hacer ejercicio o comer bien, pedir ayuda psicológica es una forma de cuidar de ti mismo. Es un paso positivo hacia una vida más equilibrada, feliz y tranquila.
Si la vergüenza o miedo de tomar la decisión de ir a terapia siguen siendo un obstáculo para ti, podrías comenzar con pequeños pasos como: hablar con una persona de confianza sobre cómo te sientes o investigar más sobre lo que implica la terapia. También es recomendable hablar de esta vergüenza en terapia y que sea un primer paso valioso para ti, ya que, el terapeuta puede ayudarte a entender de dónde viene ese sentimiento y cómo superarlo. Por tanto, es importante aclarar que el espacio terapéutico es seguro y confidencial, es decir, que lo que hables con tu psicólogo se queda en el espacio y para trabajar en ello. El terapeuta está ahí para ayudarte, no para juzgarte, y esa privacidad puede darte la tranquilidad de saber que tus sentimientos no serán expuestos.
Por otra parte, recuerda que no es necesario esperar a que las cosas lleguen a un punto crítico para buscar ayuda. La terapia también es una herramienta preventiva, puedes beneficiarte de ella incluso si solo sientes la necesidad de hablar con tu psicólogo sobre lo que te está ocurriendo y buscar soluciones antes de que empeore la situación. Puesto que, la terapia psicológica no solamente está diseñada para quienes atraviesan una crisis grave, sino que es una herramienta valiosa para cualquier persona que quiera mejorar su calidad de vida. Ir al psicólogo puede ser importante por varias razones, debido a que ayuda a fortalecer el bienestar mental y emocional de las personas, tanto en el ámbito personal como con sus otras relaciones y aspectos de su vida. Es así que, en terapia psicológica podemos trabajar en varias áreas como: el manejo y entendimiento de tus emociones, el autoconocimiento, mejora de tus relaciones, superación de traumas, prevención y tratamiento de trastornos mentales, mejora del rendimiento, potencializar tus cualidades, romper patrones, desarrollo personal, mejorar habilidades de afrontamiento, toma de decisiones importantes, desarrollo de la inteligencia emocional, entre otras.
A menudo, cuando estamos atrapados en una situación difícil, no podemos ver soluciones claras. Un psicólogo te ayuda a mirar tus problemas desde diferentes ángulos y a encontrar formas de manejarlos que tal vez no habías considerado. Por ejemplo, si estás lidiando con síntomas de ansiedad, depresión u otros problemas emocionales, la terapia puede ayudarte a reducirlos aprendiendo a manejarlos para conseguir mejorar tu calidad de vida. Así también, hablar con un profesional que te escuche de manera activa, empática y que sea totalmente externo a tu circulo ayuda a disminuir los sesgos, es decir, no hay un “bien” o un “mal”, solamente se enfocará en tus necesidades y superación. Un psicólogo te ofrece apoyo y validación, lo que puede hacer que te sientas comprendido y aceptado. Por otra parte, los psicólogos no están aquí para “darte consejos”, sino para ayudarte a crear herramientas y estrategias para lidiar con tus dificultades de manera más efectiva. Esto no solo ayuda a superar problemas actuales, sino también a estar mejor preparado para futuros desafíos. Además, uno de los mayores beneficios de la terapia es que te ayudará a identificar y comprender mejor lo que sientes, el porqué de lo que sientes, cómo te afecta o beneficia en tu vida. A veces, solo tener un espacio donde puedas expresar tus emociones sin ser juzgado ya puede generar alivio y ayudarte a sentirte mejor.
Aunque el proceso de sentirte mejor puede ser gradual, la terapia te ayuda a construir una base más sólida para tu bienestar mental a largo plazo. A medida que avances en el proceso, es probable que experimentes una mejora en tu autoestima, relaciones y equilibrio emocional. Es importante recordar que los resultados varían, ya que, todos somos un mundo diferente y lo esencial es que el proceso terapéutico está diseñado para ayudarte a sentirte mejor, a tu propio ritmo.
En conclusión… No! no solo los locos, van al psicólogo. Esa es una idea errónea que ha existido durante mucho tiempo. Cualquier persona puede beneficiarse de la terapia psicológica, ya sea para manejar el estrés, mejorar sus relaciones, lidiar con la ansiedad, o simplemente para conocerse mejor a sí mismo. Ir al psicólogo es una manera saludable de cuidar tu bienestar emocional y mental.
En Solo Psique tenemos un equipo de expertos psicólogos capacitados y con experiencia a tu disposición, para trabajar junto contigo en el manejo adecuado de tus emociones, tu autoconocimiento, mejorar tus relaciones, superar traumas, potencializar tus cualidades, romper patrones, mejorar habilidades de afrontamiento, abordar la toma de decisiones importantes, desarrollo de la inteligencia emocional, entre otras.